El Gobierno de Tanzania ha aprobado la construcción de una carretera que podría acabar con la «Gran Migración» anual de dos millones de ñúes, cebras y gacelas que cruzan el Serengeti hacia la reserva del Masai Mara, en Kenia, según un grupo de expertos en asuntos medioambientales.
La carretera tendrá una extensión de 480 kilómetros, 53 de los cuales atravesarán el Serengeti. Millones de animales abandonan las praderas del parque tanzano en la temporada seca en busca de los pastos más frescos del Masai Mara. Muchos de ellos, precisamente, pierden la vida al intentar cruzar el río Mara, infestado de cocodrilos. Su viaje de vuelta, en octubre, constituye una de las mayores atracciones turísticas de ambos países.
Tanzania anunció que construiría la carretera a través del Parque Nacional del Serengeti, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1981, en junio. De inmediato, la noticia provocó una reacción internacional: una página web ha conseguido que 3.900 personas firmen contra el proyecto. En Facebook existe un grupo que apoyan más de 14.600 usuarios.
Ruta alternativa
«La carretera funcionará como una barrera, los vehículos pesados podrían arrollar animales, la caza furtiva resultará más fácil y las especies vegetales invasoras y las enfermedades animales se extenderán más rápido debido al transporte», explica el conversacionista keniano Richard Leakey.
La Sociedad Zoológica de Fráncfort (FZS, en inglés), que financia la administración del Serengeti, también se ha mostrado muy crítica. Por eso, ha propuesto un plan alternativo por el que la carretera bordearía el parque por el sur: «Serviría a cinco veces más gente que la ruta proyectada y sería igual de útil para conectar los mayores centros regionales».
Carreteras para usar «en cualquier circunstancia»
El presidente tanzano, Jakaya Kikwete, reconocido internacionalmente por sus esfuerzos para conservar el medio ambiente, dijo en su último discurso mensual en julio que su objetivo era enlazar todas las zonas del país con carreteras que se pudieran usar en cualquier circunstancia meteorológica.
Kikwete ha criticado a los ecologistas por no tener en cuenta las necesidades de los habitantes del noroeste tanzano, que en la actualidad tienen que dar un rodeo de más de 400 kilómetros para dirigirse a la capital económica del país, Dar es Salaam.
Se prevé que la carretera se empiece a construir a principios de 2012. Y será de grava, para garantizar la «Gran Migración».
La carretera tendrá una extensión de 480 kilómetros, 53 de los cuales atravesarán el Serengeti. Millones de animales abandonan las praderas del parque tanzano en la temporada seca en busca de los pastos más frescos del Masai Mara. Muchos de ellos, precisamente, pierden la vida al intentar cruzar el río Mara, infestado de cocodrilos. Su viaje de vuelta, en octubre, constituye una de las mayores atracciones turísticas de ambos países.
Tanzania anunció que construiría la carretera a través del Parque Nacional del Serengeti, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1981, en junio. De inmediato, la noticia provocó una reacción internacional: una página web ha conseguido que 3.900 personas firmen contra el proyecto. En Facebook existe un grupo que apoyan más de 14.600 usuarios.
Ruta alternativa
«La carretera funcionará como una barrera, los vehículos pesados podrían arrollar animales, la caza furtiva resultará más fácil y las especies vegetales invasoras y las enfermedades animales se extenderán más rápido debido al transporte», explica el conversacionista keniano Richard Leakey.
La Sociedad Zoológica de Fráncfort (FZS, en inglés), que financia la administración del Serengeti, también se ha mostrado muy crítica. Por eso, ha propuesto un plan alternativo por el que la carretera bordearía el parque por el sur: «Serviría a cinco veces más gente que la ruta proyectada y sería igual de útil para conectar los mayores centros regionales».
Carreteras para usar «en cualquier circunstancia»
El presidente tanzano, Jakaya Kikwete, reconocido internacionalmente por sus esfuerzos para conservar el medio ambiente, dijo en su último discurso mensual en julio que su objetivo era enlazar todas las zonas del país con carreteras que se pudieran usar en cualquier circunstancia meteorológica.
Kikwete ha criticado a los ecologistas por no tener en cuenta las necesidades de los habitantes del noroeste tanzano, que en la actualidad tienen que dar un rodeo de más de 400 kilómetros para dirigirse a la capital económica del país, Dar es Salaam.
Se prevé que la carretera se empiece a construir a principios de 2012. Y será de grava, para garantizar la «Gran Migración».