
En declaraciones divulgadas este domingo por la prensa local, el clérigo subrayó, asimismo, que aquellos que sean acusados de “mohareb” (enemigos de Dios, un delito penado en Irán con la muerte) serán tratados como merecen.
Los dos convictos fueron ahorcados “en el momento preciso”, y sus derechos “fueron observados” durante el juicio, aseguró Lariyaní, cuyas palabras citó la televisión estatal por satélite en inglés PressTv.
El jefe del Poder Judicial aclaró que ambos pertenecían a un grupo “terrorista” y que cuando fueron capturados estaban en posesión de explosivos